La ciudad de Clermont-Ferrand es la capital del departamento de Puy-de-Dôme en Francia. Esta pequeña ciudad es un destino turístico poco conocido que alberga un gran encanto y muchos lugares interesantes por descubrir. Así que si deseas visitar una ciudad francesa distinta a lo habitual, anímate a viajar a Clermont-Ferrand y explorar todo lo que esta ciudad tiene para ofrecer.
¿Qué sitios ver y visitar en la ciudad de Clermont-Ferrand?
Clermont-Ferrand está ubicada en la región Auvernia-Ródano-Alpes y se caracteriza por situarse cerca de una gran cantidad de volcanes. Además de esto, la ciudad es muy popular por ser la sede de la reconocida empresa manufacturera de neumáticos Michelin. En caso de que estés planeando realizar un viaje a Francia pronto y quieras conocer este destino, a continuación te presentaremos los puntos de interés turístico que no puedes perderte.
Catedral de Nuestra Señora de la Asunción
La Catedral de Nuestra Señora de la Asunción es el edificio religioso de mayor importancia en la ciudad. El templo, de estilo gótico, fue clasificado como Monumento Histórico de Francia en el año 1862. Antes de erigirse esta catedral, se encontraban en el emplazamiento tres santuarios cristianos; su construcción data del siglo XIII. El color oscuro característico de el templo se debe a que está construido con piedra de Volvic, una población cercana a Clermont-Ferrand.
Basílica de Nuestra Señora del Puerto
Otro de los edificios religiosos que no puedes dejar de visitar en este destino es la Basílica de Nuestra Señora del Puerto (Notre Dame du Port), clasificada como Monumento Histórico de Francia en 1840 e incluida en 1998 dentro del Patrimonio de la Humanidad en el término ‘Caminos de Santiago de Compostela en Francia’. El edificio, de estilo románico auvernés, fue construido entre los siglos VI y XII; fue declarada como basílica menor en 1886.
Plaza de Jaude y estatua de Vercingétorix
La Plaza de Jaude es uno de los principales puntos de encuentro para los clermonteses. Como tal, la plaza fue fundada en la época romana, pero durante el medievo fue abandonada. Para 1630, la iglesia de Saint-Pierre-des-Minimes fue edificada; años más tarde se construyó un estanque y una fuente, y para 1750 la plaza se transformó en un recinto ferial. Con el paso del tiempo se fueron construyendo otros edificios que a día de hoy podemos visitar, como el Centre Jaude, la Ópera-Teatro y las Galerías Lafayette (antes Galerías de Jaude).
En la Plaza de Jaude se encuentra la estatua ecuestre de Vercingétorix, un emblema de la ciudad. La estatua fue puesta en la plaza en el año 1903; fue esculpida por Frédéric Auguste Bartholdi, escultor también de la estatua de la Libertad en Nueva York.
L’Aventure Michelin
Uno de los mayores atractivos turísticos de la ciudad es, sin lugar a dudas, el museo L’Aventure Michelin. En dicho museo se expone la historia de la empresa de neumáticos Michelin y la historia del caucho para su uso en neumáticos para todo tipo de vehículos. Este museo fue abierto en el 2009 y la información del mismo se puede encontrar en francés e inglés.
Otros puntos de gran interés turístico para ver en Clermont-Ferrand
Como ves, en Clermont-Ferrand podremos hallar sitios de lo más interesantes. Si tras visitar cada uno de los lugares anteriormente presentados aún tienes tiempo para continuar conociendo más de esta encantadora ciudad, no dudes en visitar los siguientes puntos de interés turístico.
Museo Bargoin
El Museo Bargoin, inaugurado en el año 1903, cuenta con una colección de arqueología y artes textiles. Antes de ser el museo que se conoce en la actualidad, se tenía pensado que fuese un museo de bellas artes, sin embargo, la colección de arte que poseía fue trasladada al Museo de Arte Roger-Quilliot a finales del siglo XX.
Museo de arte Roger-Quilliot
Como se acaba de señalar, el museo de Arte Roger-Quilliot recibió la colección de arte del museo Bargoin, pero, además, recibió la colección del museo Ranquet. Este museo fue inaugurado en 1992 y las obras que componen su colección son expuestas de manera cronológica. Dentro de la colección del museo podremos hallar obras de artistas como Georges Diebolt, Jacques Blanchard, Théodore Chassériau o François Boucher.
El museo de arte Roger-Quilliot tiene su sede en un edificio que data del siglo XVII y que antiguamente fue un convento de las Ursulinas. El edificio está catalogado como Monumento Histórico.
Parque de Montjuzet
Si deseas obtener unas excelentes vistas de la ciudad y disfrutar de un tranquilo paseo rodeado por la naturaleza, visita el parque de Montjuzet. Este es el parque más grande de Clermont-Ferrand con 26 hectáreas de superficie, y desde este se puede ver un hermoso y privilegiado panorama de toda la ciudad. En el parque se pueden encontrar encinas, olivos, palmas chinas, eucaliptos, entre otras especies; también podremos ver dos esculturas contemporáneas en el parque: la Bola Errática de Takashi Naraha y la Fuente de la Inducción Cromática de Carlos Cruz-Díez.
Fuente Amboise
La Fuente Amboise, llamada también como Fuente del Renacimiento, es una fuente de estilo renacentista italiano y gótico. Fue mandada a esculpir por Jacques d’Amboise al escultor Chapart en 1511. Antes de que la fuente se ubicara en su emplazamiento actual (Place de la Poterne) estuvo situada en diversos lugares, entre ellos la Place Derrière-Clermont y la Place Delille, hasta que en 1962 se instaló en la Place de la Poterne.
Esta fuente, considerada como una obra de transición del estilo gótico al renacentista, está hecha de piedra volcánica extraída de las canteras de Volvic, de allí el característico color de la fuente.
Sin dudas, la ciudad de Clermont-Ferrand es un lugar fascinante que debes conocer. Si decides viajar a este destino y el tiempo te lo permite, tampoco olvides visitar el Templo de Mercurio, situado en el volcán inactivo Puy de Dôme, a unos 10 kilómetros al oeste de la ciudad.