La ciudad de Lyon es la tercera más poblada de Francia y alberga importantes patrimonios, tanto históricos como arquitectónicos. Conocida como la capital de la seda, Lyon logró convertirse en una ciudad industrial de gran importancia en el siglo XIX gracias a la industria de la seda. En caso de que te interese conocer esta preciosa urbe, a continuación te orientaremos para que sepas qué ver y visitar en Lyon.
¿Qué ver y visitar en Lyon?
Hay muchos lugares hermosos e interesantes dentro de la ciudad; el solo pasear por el Viejo Lyon y conocer sus numerosos traboules es una experiencia única y fascinante. Si no planeas quedarte mucho tiempo en la ciudad, puedes visitar los siguientes sitios de interés turísticos en Lyon.
Basílica Notre-Dame de Fourvière
Situada en la colina Fourvière, la Basílica de Notre-Dame de Fourvière ofrece unas vistas asombrosas de la ciudad. Si tienes la suerte de visitarla en un día despejado, podrás incluso ver los Alpes Franceses. Además de brindar una excelente panorámica de la ciudad, merece la pena visitar la Basílica para apreciar su hermoso diseño de estilo románico-bizantino.
Dentro de la edificación encontraremos la cripta de San José y muchos elementos decorativos preciosos, como sus mosaicos y vidrieras. En la Basílica también se halla un Museo de Arte Sacro.
Catedral de Lyon
La Caterdral de Lyon se sitúa en el Viejo Lyon. Esta cuenta con elementos de estilo románico y gótico. En el interior de la catedral se encuentra un reloj astronómico del siglo XVI con autómatas que se van moviendo durante el día. El reloj fue construido en base al geocentrismo, por lo cual la fecha exacta la indica solo cada cierto tiempo.
En la parte trasera de la catedral podremos encontrar el Jardín Arqueológico; en él se encuentran los restos de la antigua sede episcopal. Asimismo, a un lado de la catedral se sitúa la escuela del coro, uno de los edificios más antiguos de la ciudad.
Place des Terreaux
La Place des Terreaux está repleta de sitios interesantes. En primer lugar, se encuentra el Ayuntamiento (Hôtel de Ville), y en segundo lugar, el Palacio Saint-Pierre. En dicho palacio se halla el Museo de Bellas Artes, uno de los más destacados del país.
La fuente que se puede apreciar en el centro de la plaza fue diseñada por el mismo creador de la Estatua de la Libertad, es decir, por Bartholdi. Un dato curioso de esta estatua es que fue diseñada para Bordeaux, pero la ciudad la rechazó. De hecho, los cuatro corceles de la estatua representan los cuatro afluentes del río Garona, el cual pasa por Bordeaux.
Vieux Lyon
El Vieux Lyon o Viejo Lyon se encuentra situado al pie de la colina Fourvière. Este es un barrio medieval y renacentista que no te puedes perder al visitar la capital de la seda. Compuesto por tres barrios (Saint-Georges, Saint-Jean y Paul), el Vieux Lyon se encuentra repleto de lugares encantadores e interesantes.
Aproximadamente la mitad de los populares traboules de la ciudad se encuentran en el Viejo Lyon. Sin duda alguna, merece la pena dedicar un día completo a la visita de este barrio para descubrir gran parte de sus encantos.
Otros sitios imperdibles que debes ver en Lyon
Por supuesto, Lyon tiene muchos otros lugares interesantes que merecen ser visitados por los turistas, como la Plaza Bellecour, el teatro romano o la colina Croix-Rousse. Así que si tu estadía en la ciudad te lo permite, no puedes perderte los siguientes sitios de interés.
Plaza de Bellecour
Esta plaza es una de las más grandes de Europa que tiene forma rectangular. De ella salen dos calles comerciales consideradas como las más grandes de Lyon, la calle República y Víctor Hugo. En el centro de la plaza se halla una estatua del Luis XIV, y en una de las esquinas de la Place Bellecour podremos encontrar un monumento al autor de ‘El Principito’, Antoine de Saint-Exupéry, el cual nació en Lyon.
En caso de que visites la plaza en época navideña, podrás ver la gran noria que es instalada en el lugar para las festividades.
Ópera de Lyon
El edificio de la Ópera de Lyon es llamativo por su estilo neoclásico y moderno. La ópera fue inaugurada en 1831, pero fue reformada en el año 1993, dándole así su bóveda de metal con cuerpo de vidrio.
Para visitar como tal el edificio y poder ver su interior, necesitarás reservar tu visita guiada, la cual solo está disponible en francés. También puedes visitar la ópera cuando se realicen espectáculos en ella.
Teatro romano
Otro de los sitios imperdibles de esta ciudad francesa es, indudablemente, el Teatro Romano. Con una capacidad de 10.000 espectadores, este teatro romano aún se conserva en buen estado y es utilizado cada año para celebrar Les Nuits de Fourvière, un festival de cine, teatro, danza y música.
A un lado del teatro se encuentra el Museo Galo Romano o Museo de Arqueología. Dicho museo alberga la estatua de Neptuno, un conjunto de piezas de mosaicos provenientes de diversas villas romanas ubicadas en la antigua Lugdunum (nombre con el que fue fundado Lyon en el año 43 a. C), el Calendario Galo, entre otras piezas importantes.
La Croix-Rousse
Además de la colina Fourvière, en Lyon se halla también la colina Croix-Rousse. En esta última colina se encontraban los talleres de seda de la ciudad, por lo cual también se le denominaba como ‘la colline qui travaille’. El Mur des Canut, uno de los murales más grande de Europa se ubica en la Croix-Rousse.
En esta colina se encuentra también la Cour des Voraces, un popular traboule de gran importancia histórica en la ciudad, pues refugió a los Canuts (trabajadores de seda) durante sus revueltas. Asimismo, durante la Segunda Guerra Mundial, las redes de resistencia lograron escapar de los alemanes gracias a los traboules de la ciudad, desconocidos para los extranjeros.
Sin duda, la ciudad conocida como la capital de la seda tiene muchos rincones interesantes para visitar, cuya importancia histórica es tal, que ha sido clasificada como ciudad de arte y de historia por la UNESCO.